Desenmarañando los cables que mantienen la salud

Ponente(s): Elisa Domínguez Hüttinger
Una característica distintiva de los sistemas fisiológicos sanos es su capacidad de ser a la vez plásticos y robustos. Es decir, responden de manera dinámica a medios ambientes cambiantes sin desviarse demasiado o por demasiado tiempo de un punto fijo homeostático. Este fino balance se logra gracias a complejas redes de regulación entre agentes biológicos, tales como moléculas, células y tejidos. ¿Cuáles son las características estructurales de estas redes de control que mantienen la homeostasis? La investigación en el campo de la biología matemática permite abordar esta pregunta desde la teoría de los sistemas dinámicos. Concretamente, se estudian las interacciones entre agentes biológicos por medio de modelos matemáticos, como los sistemas de ecuaciones diferenciales no lineales. Esto permite describir formalmente los mecanismos que subyacen el mantenimiento de la homeostasis y además predecir qué perturbaciones darán lugar a su pérdida. En mi charla les contaré cómo aplicamos este enfoque para estudiar un tipo de tejido animal, el epitelio. Este recubre nuestro cuerpo (la epidermis) y nuestros órganos (ej. la mucosa respiratoria). Dado que forma la barrera entre “nosotros” y el ambiente, resulta relevante entender cómo se mantiene la plasticidad y la robustez ante fluctuaciones en el ambiente y así predecir qué perturbaciones llevan al desarrollo de enfermedades infecciosas, inflamatorias y carcinomas